Desde la agrupación H.I.J.O.S Rosario queremos expresar nuestro repudio a la orden de detención que el Juez Federal Marcelo Martínez De Giorgi impartió este jueves contra la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe De Bonafini.
Entendemos esta decisión judicial como una clara provocación contra la bandera de los derechos humanos -que tiene al pañuelo de las Madres como su máximo símbolo- en particular, y contra toda la militancia social y política en general.
Consideramos que el hecho se inscribe en una estrategia de persecución y estigmatización política hacia todos aquellos que reivindican buena parte de los derechos y conquistas obtenidos a lo largo de la última década, y que se lleva a cabo desde el Poder Ejecutivo, parte del Poder Judicial y las grandes corporaciones económicas, con las de medios de comunicación como vanguardia.
Los avances en materia de derechos humanos, laborales, de inclusión social, de democratización de la comunicación, de distribución de la riqueza, de integración latinoamericana, de independencia económica, son objeto de una brutal y revanchista regresión, que al mismo tiempo se oculta bajo una siniestra estrategia articulada por ese poder político-mediático-judicial.
Los despidos, la inflación, el pago a los fondos buitre, el endeudamiento externo, la indulgencia con los genocidas, la destrucción de la industria nacional y los tarifazos pretenden ser tapados bajo la cortina de humo de “la corrupción”, siempre que sea “K”; ya que de las cuentas y millones de dólares del presidente y su familia, escondidos en cuevas fiscales utilizadas para evadir impuestos u ocultar su origen ilegal, no se habla. (Y mucho menos se habla de la falta de investigación de jueces y fiscales en esas causas contra Mauricio Macri y cia).
Pero la selectiva persecución judicial contra Milagro Sala y sus compañeros de la Tupac Amaru, contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y contra Hebe Bonafini, no hacen más que poner en evidencia esa estrategia. Por eso desde H.I.J.O.S expresamos nuestra solidaridad con Hebe y todos los compañeros perseguidos por entender que la militancia y la política deben estar al servicio de los intereses de las mayorías sociales, y no de la minoría oligárquica y pro imperialista que con sus Ceos en el Estado, nos gobierna desde el 11 de diciembre pasado.
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